enero 6, 2025

El Post Pandemia

Noticias Constructivas

Reflexiones de una vida dividida

Post Pandemia ilustración oscar araya

Ilustración por Óscar Araya.

Durante estos últimos meses hemos tenido que reorganizar nuestras vidas como nunca antes, y mientras muchos hemos intentado aprovechar el tiempo para aprender algo que nos beneficie, como adquirir un nuevo conocimiento que nos ayude a encontrar trabajo, pensar en nuestro lado artístico o en nuestro desarrollo espiritual, muchos -quizá la mayoría- no han tenido ese privilegio. 

¿Cómo podemos darnos cuenta de que esto que estamos viviendo nos trae la oportunidad de crecer y desarrollarnos, de crear lazos y fortalecer los que ya tenemos, cuando otros están sufriendo, perdiendo sus trabajos e incluso la vida de sus amigos, familiares y quizá también ya han perdido las esperanzas?

A pesar de lo terrible que pueden ser estas dificultades, no podemos olvidar que cada vez que nos ha tocado enfrentar una crisis, siempre podemos salir adelante con algún aprendizaje, y estos aprendizajes después se manifiestan en cambios concretos en nuestras vida, hoy este aprendizaje llegará a todos los que habitamos esta tierra, eso de seguro se manifestará en cambios concretos que harán mejorar nuestra sociedad, nuestra humanidad. 

Esta pandemia nos ha recordado lo frágil que es la vida humana, y que ya no podemos seguir “mirando para el lado”, hacernos los desentendidos, o esperar a que sean otros los que respondan. ¿Tenemos vecinos que no tienen como alimentarse? entonces hagamos una olla común; ¿Tenemos un conocido que ha perdido a un ser querido? debemos estar ahí para apoyarlo y consolarlo; ¿Vemos la necesidad de parte de jóvenes y de niños por querer conversar, desestresarse o desahogarse? generemos los espacios que respondan a esta necesidad; ¿Tenemos conflictos con algún familiar o ser querido? es hora de resolverlo. 

Hoy vemos que nuestras instituciones no logran responder a las necesidades que todo esto ha generado, y es justamente ahí en donde nos toca pensar en cuál es nuestro rol, y en cómo son nuestras comunidades y los individuos que las conformamos los que encarnamos de tal forma la colaboración que desde nuestras propias familias, con nuestros propios vecinos y en nuestros propios barrios y por supuesto, en la medida de nuestras posibilidades, nos alzamos a hacer una contribución.

Todos nosotros, como humanos que somos, necesitamos estar empoderados más allá de las posibilidades que el gobierno nos da, como ciudadanos debemos ser agentes y protagonistas para lograr un cambio en la conciencia colectiva de nuestra sociedad y a pesar de que la perspectiva de muchos frente a la pandemia ha sido de que nada va a cambiar, de que nada realmente bueno podría surgir de esto, yo sí he tenido la posibilidad de ver muchos cambios que ya están ocurriendo y que son cambios positivos, he visto cómo iniciativas para apoyarnos mutuamente han surgido entre amigos y vecinos, he visto a personas de todos lados reuniéndose por Zoom, Skype, Whatsapp no sólo para conversar, sino que para brindarse aliento, apoyo e intentar estar más cerca que nunca a pesar de la distancia física. 

He visto cómo esos jóvenes a quienes siempre se les ha tildado de “rebeldes e irreverentes”, se han juntado para conversar sobre temas profundos.

He visto cómo esos jóvenes a quienes siempre se les ha tildado de “rebeldes e irreverentes”, se han juntado para conversar sobre temas profundos. He visto conversaciones acerca de la vida y la muerte, conversaciones sobre la igualdad de género, sobre cómo brindarse apoyo entre familias, una preocupación genuina por aquellos que son aún más chicos que ellos, por esos niños a los que a veces ni siquiera están en el centro de la prioridad.

Puedo decir con propiedad que la idea de que los jóvenes sólo hablan de videojuegos, y que sus intereses son simplemente el ocio y la diversión es completamente errada, he visto cómo los jóvenes hoy desean un cambio y buscan la forma de concretarlo, he visto cómo los jóvenes son el presente de la nueva etapa de nuestra sociedad. Y a pesar de que algunos pueden argumentar que no todos “están en la misma”, la realidad nos muestra lo contrario.

Apoyémonos mutuamente, busquemos ayuda si lo necesitamos, pero también entreguémosla, siempre podremos dar algo, aunque sea despertar la alegría de vivir en los demás.

Oscar Araya
illustrador/desarrollo visual